Los gentiles vivían en al menos dos lugares de Aia: en Armontaitz y Aiaiturrieta.
La mujer gentil de la cueva Armontaitze situada en la parte alta de Aia, llamada Zirpizirbi, acudía al caserío Aiarrezar a ayudar a sus moradores en la escarda de maíz del campo llamado Kixkarre.
Por la mañana se veían huellas de gentil por doquier; indicios de la actividad habida durante la noche. En una ocasión en que estaban trabajando un gentil de Aiaiturrieta gritó diciendo: ha muerto Zirpizarba. Zirpizirbi bajó inmediatamente a Aiaiturrieta.
Al día siguiente Zirpizirbi, cuando fue a Aiarre, comentó que Zirpizarba había muerto.